La construcción de la paz en Guatemala; actores, procesos y lecciones

Los acuerdos definitivos de paz para Guatemala se firmaron el 29 de diciembre de 1996. Sin embargo, los alcances del proceso de paz van más allá de la mera firma de los acuerdos; han abierto nuevos horizontes para Guatemala y para Centroamérica en su conjunto. El proceso mismo se ha revelado como un modelo para los mecanismos de los procesos de paz en el futuro, debido a sus modalidades al igual que a los actores a los que involucró. La firma de la paz para Guatemala constituye la culminación de varios esfuerzos, desde aquéllos desarrollados por los propios guatemaltecos —gobierno, guerrilla, organismos empresariales, organizaciones no gubernamentales (ONG), partidos, entre otros—, hasta los que debieron su origen a la participación de otros actores cuya contribución fue determinante para la firma de la paz —Grupo de Contadora, Grupo de Países Amigos, la ONU, México, entre otros. Además de describir y analizar la labor de esos actores, el ensayo estudia el conjunto de esfuerzos diplomáticos que permitió la firma de los acuerdos de paz; en particular, destaca el papel desempeñado por México en la construcción del andamiaje de la paz para Guatemala, no sólo a través de su diplomacia, sino como refugio para los guatemaltecos víctimas del conflicto armado y como sede de las negociaciones de paz que paulatinamente se tradujeron en acuerdos básicos del proceso pacificador. En las conclusiones, el autor subraya las que, a su juicio, constituyen las nueve lecciones más importantes dejadas por el proceso de paz para Guatemala.