La crisis intrínseca del Consejo de Seguridad
Contenido principal del artículo
Resumen
Siempre ha existido una crisis política dentro del Consejo de Seguridad. El juego de poder e intereses de las grandes potencias —los miembros permanentes de ese órgano y sus aliados cercanos— imponen límites significativos a la capacidad del Consejo para cumplir con su “responsabilidad primordial en el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales”. El alto nivel de cooperación entre los miembros del Consejo, que siguió al fin de la guerra fría, ha disminuido frente a la tendencia de las potencias a actuar fuera del Consejo e, incluso, fuera de la ONU. Las razones que hicieron posible que, en la inmediata posguerra fría, el Consejo superara las dificultades que por más de 45 años impidieron su adecuado funcionamiento, se debilitan ante la tendencia de las potencias a no acudir a la instancia multilateral creada para el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales porque sienten que disminuye su capacidad de decisión en materia de seguridad.